Como lograr una entrevista efectiva???

Superadas la elaboración del currículum vitæ y la búsqueda de opciones laborales, la entrevista de trabajo se erige como la gran prueba de fuego para el postulante. Pero no es sólo eso: también es el primer contacto físico entre el aspirante y la empresa, la primera etapa de varias que tiene el proceso de selección, y la única oportunidad para causar una excelente primera impresión en el seleccionador.
El contacto puede ser de carácter directo (entre nosotros y la empresa) o indirecto (cuando la empresa contrata a una consultora de selección). En cualquier caso, el postulante debe pasar por una serie de entrevistas, que necesita superar adecuadamente. Ya que el candidato a empleado se ha convertido en un producto, un proveedor de servicios, urge evaluar sus fortalezas, debilidades y valores. Cada entrevistador está buscando al solicitante que pueda hacer el trabajo (habilidades), que se sienta motivado realizándolo (interés), y que se proyecte en la empresa a largo plazo (ventajas).Si la evaluación comienza al ingresar a la sala de espera, convencer a la empresa de que no hay mejor candidato que nosotros para el puesto también debe plantearse desde el saque. El éxito en la entrevista depende de la preparación: no siempre el mejor candidato -es decir, el candidato de mejores competencias- obtiene la plaza. La obtiene la persona mejor preparada.Algunas personas son muy efectivas y generan una buena impresión durante la entrevista, no siendo necesariamente los mejores prospectos. Otras personas con un currículum impresionante bajo el brazo y perfectamente capacitadas, por el contrario, no logran entusiasmar al seleccionador de la misma manera. Estas personas no saben qué decir, se les olvidan las cosas, no pueden responder rápidamente y ponen en evidencia sus nervios. Pueden ser excelentes profesionales, con un perfil brillante, pero si no generan el impacto esperado, terminarán siendo relegados por otros candidatos con un perfil inferior al de aquellos.Este problema tiene su génesis en nuestra parte inconsciente, la cual el seleccionador espera encontrar en sintonía con la parte consciente. En otras palabras, el lenguaje no verbal debe hallarse en consonancia con el lenguaje verbal: lo que un candidato entrevistado diga con la voz, debe condecirse con lo que manifieste su cuerpo. Si la sincronía no existe, no va a producirse el impacto deseado, ya que éste es directamente proporcional a la coherencia que exista entre los dos lenguajes.La coherencia entre ambos lenguajes se expresa por medio de gestos, miradas, la posición corporal, el movimiento del cuerpo, la voz (tono, volumen, velocidad, vocalización, modulación, entonación), la energía y la motivación. Estos aspectos son fáciles de analizar y detectar para el seleccionador entrenado -mientras que, para el candidato no preparado, son difíciles de aparejar de forma consciente y simultánea con lo que dice.Un error cometido frecuentemente por muchos candidatos es la mentira, fácil de detectar para un psicólogo experto. Mentir es la peor equivocación que podemos cometer en un proceso de selección, ya que el lenguaje no verbal terminará delatándonos -de igual manera ocurre con las pruebas psicotécnicas, que darán una aproximación de lo que nosotros realmente somos, más allá de lo que digamos.El proceso de selección de personal avanza en doble sentido: así como ellos nos estudian, nosotros también los estudiamos. Pero resulta evidente quién tiene la última palabra. En conclusión, no debemos acudir nerviosos y/o aprehensivos a la entrevista -es mucho más recomendable ir en plan de conversar distendidamente.

0 comentarios: